viernes, 3 de septiembre de 2010

El calor puede llegar a afectar seriamente al humor de las personas, según expertos.‏

1/09/2010 · Europa Press. 2010 Sep
El calor puede llegar a afectar seriamente al humor de las personas, según expertos.

La psicóloga María Jesús Álava ha apuntado que los efectos del calor afectan más a las personas de lo que uno piensa y en mayor o menor medida en función de las características personales y físicas de cada uno, ya que las personas con la tensión baja o con problemas de circulación son más vulnerables, así como los que no están acostumbrados a altas temperaturas, y ha añadido que los niños y personas mayores resultan más sensibles ante los efectos del calor, produciendo una mayor irritabilidad.

"Cuando el calor llega de golpe a nivel psicológico produce además cansancio generalizado, apatía, decaimiento, astenia, agotamiento, sensación de malestar", y en algunas personas, ha explicado, "mucho negativismo y mal humor, impaciencia y en definitiva dificultades de convivencia". Una de las causas claves, a su juicio, es lo difícil que es conciliar el sueño, lo que provoca insomnio, y que uno se despierte ya con un alto nivel de ansiedad.

Además, aumenta la agresividad. Y es que, tal y como ha subrayado, "está muy unido, y no por falta de casualidad, que muchos de las conductas de mayor agresividad y de los sucesos más violentos que se producen en el país a lo largo del año tienen lugar precisamente durante el verano bajo los efectos del calor", sobre todo en las personas con un nivel de autocontrol emocional más bajo.

El psicólogo Juan Carlos Sánchez, del hospital Morales Meseguer, se une a las declaraciones de Álava, añadiendo que es la unión de tres condiciones lo que provoca estos cambios. Se trata del calor en exceso y de los cambio de residencia, así como de los hábitos durante las vacaciones de verano.

"El calor afecta al sueño y los cambios de residencia y hábitos de vida hacen que el descanso disminuya y aparezca como efecto el cansancio, la apatía, el decaimiento, la debilidad, la desmotivación, que día tras día lleva a cambios de humor, al negativismo y la impaciencia", ha indicado. Eso provoca, según él, "un aumento de las discusiones familiares, de las rupturas de pareja y de otros sucesos que pueden llegar a tocar los límites de la violencia".

La doctora María Jesús Álava ha señalado, además, que las mujeres y los hombres tienen un concepto diferente del calor, pues produce mayor irritabilidad y tensión en el hombre y en la mujer más decaimiento, además ésta es capaz de soportarlo durante más largo plazo. Asimismo, es aconsejable el descanso y conseguir dormir, "además del autocontrol, mucha dosis de paciencia y toneladas de buen humor".
En el caso de los más pequeños, los expertos aconsejan que duerman más de lo habitual o una 'siesta' y hagan mucho ejercicio físico a horas recomendables y a ser posible en el agua, bajando la temperatura corporal. En los adultos, recomiendan una ducha fría y si no es posible, mojarse las muñecas con agua fría durante dos o tres minutos. Otros de los consejos es beber mucha agua y a pequeños sorbos. "La hidratación contribuye a equilibrarnos mucho, incluso a nivel emocional", ha señalado Álava.