Se emplea el plomo para protegerse contra determinadas vibraciones nocivas, pero el oro posee un poder de protección muy superior al del plomo, y puede también ser utilizado como pantalla para recibir únicamente influencias favorables e incluso ampliar estas influencias.
En efecto, imaginad un minúsculo habitáculo recubierto de láminas de oro donde una persona pudiera refugiarse para realizar un trabajo beneficioso para sí mismo y para todo el mundo.
Valdría la pena tener semejante experiencia, pero como esta instalación sería demasiado costosa, de momento encualquier caso, evidentemente queda excluida.
Entonces, mientras tanto, debemos al menos ser conscientes del oro que ya poseemos, para trabajar con él. Porque también poseemos oro en nuestro cuerpo físico.
Sí, nuestra sangre contiene oro, y este oro que tenemos en la sangre nos da energía para trabajar, por tanto para adquirir riquezas.
Y también nos protege de la enfermedad, porque emite una especie de vibración que rechaza la invasión de microbios y virus.
Y finalmente, en otra forma, el oro ilumina nuestra conciencia; con este oro recibimos sabiduría y penetramos en los secretos de la naturaleza.
Sin duda es útil amasar oro en nuestras arcas, pero es mucho más útil e indispensable aumentar el oro en uno mismo!"
Omraam Mikhaël Aïvanhov
